La Impaciencia
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La paciencia se dice que es una virtud para aquella persona que la posee, aunque la mayoría consideran ser impacientes en algún momento de su vida. La impaciencia es una conducta aprendida que suele ser característica sobre todo de aquellas personas que son ambiciosas, competitivas, impulsivas y con cierta intolerancia a la frustración. Cuando desean algo, lo quieren ya, sin valorar ni reflexionar acerca de lo que comporta actuar de forma tan impulsiva o deliberada, aunque hay que decir que aveces la impaciencia hace que la motivación por las cosas se incremente. Sí que es cierto que las personas impacientes pueden obtener más decepciones debido a que sus elecciones son rápidas y sin pensar simplemente por el hecho de no esperar, por eso es importante darse cuenta de que a veces es mejor la espera para obtener mayor beneficio o seguridad.
La impaciencia es algo habitual en las actitudes de los niños y adolescentes pero que suele seguir en la conducta del adulto si no se ha aprendido a valorar la espera, porque realmente la personalidad impaciente no tiene miedo al tiempo sino más bien a la espera para obtener resultados.
Las ventajas de ser impaciente es que se vive en el momento presente, actuando según los deseos inmediatos y satisfaciendo las necesidades en el momento en que aparecen. Por eso ser impaciente ayuda a mejorar algunas de las propias facetas y cuando se logra lo que se espera, aparece una gran satisfacción personal incrementando la autoestima y mejorando la confianza en una misma.
Pero cuando la impaciencia rodea todas las conductas, tiene una gran desventaja para la persona, por ejemplo está demostrado que las personas impacientes suelen presentar mayor nivel de ansiedad y frustración.
Por ejemplo en el amor cuando se es impacientes por encontrar a la persona con la que compartir la vida, las emociones, el cariño, etc. la obsesión por ello se intensifica y causa gran ansiedad para la persona en sí, teniendo más decepciones acerca de sus relaciones por intentar conseguir el amor de forma rápida, que a lo mejor no es del todo compatible con el ideal de pareja.
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El dicho
Todo lo Bueno se hace Esperar
Es algo que las personas con personalidad impaciente deberían recordar cuando tienen esa necesidad inmediata de satisfacer sus deseos.
¿Por Que Surge la Impaciencia?
Las personas que son impacientes suelen mostrar una personalidad impulsiva y la reacción hacia el miedo de no lograr lo que quieren o de perder la oportunidad les hace actuar con gran impaciencia, sin tener en cuenta que su comportamiento puede desencadenar frustraciones a corto plazo si no se logra lo que se quiere.
Investigaciones demuestran que si de niños no se enseña a valorar la espera para obtener mejores resultados o beneficios, esta actitud carente de paciencia puede ser perjudicial al ser adultos, incluso puede perjudicar también en las relaciones si los demás no comprenden esta necesidad de urgencia que muestra la persona impaciente.
Cuando una persona nota que no puede controlar su impaciencia lo aconsejable es tomar conciencia de los propios actos y responsabilizarse de ello, cuando aparezca esa necesidad de impaciencia intentar respirar y valorar si de verdad es importante el no poder esperar es una forma favorable para ir aprendiendo lo que la paciencia aporta al bienestar, buscando alternativas e incrementando la actitud positiva hacia los beneficios de esperar para conseguir lo que tan urgente parece, pensar en las consecuencias que pueden aparecer posteriormente y saber que a veces las cosas no sólo dependen de una misma, sino que hay influencia externa. Es una misma la que puede controlar estos impulsos de impaciencia por las cosas por lo que simplemente hay que aprender a esperar y a valorar.
TODAS LAS COSAS TIENEN SU MOMENTO, LA PACIENCIA FAVORECE NUESTRAS METAS