Fuera Complejos
Volver Articulos del Bienestar
Los complejos forman parte de la visión que creemos que los demás tienen sobre nosotros mismos, siendo esos complejos normalmente los defectos que creemos tener y los cuales nos influyen negativamente en nuestra autoestima y en la forma de relacionarnos con los demás. La comparación que hacemos con otras personas son la raíz principal de la aparición de los complejos personales, por eso es importante valorarse a una misma y aceptarse tal como una es.
Nuestra sociedad muestra lo que considera ideal y perfecto, creando estereotipos sin tener en cuenta que cada persona es diferente y es única, y que lo que nos define no es sólo el físico o un aspecto de la personalidad, sinó de la persona en sí y sin tener la necesidad de buscar siempre la aprobación con los demás.
Otra cosa que solemos hacer con nuestros complejos, es darles demasiada importancia y mostrarlos a los demás, fomentando la atención hacia ese aspecto que tanto nos perjudica en nuestro bienestar. Por ejemplo, las personas que se acomplejan por su físico suelen ir con tallas de ropa superior a la que utilizan, evitan cualquier evento público e incluso dejan de ir a la playa o a la piscina en verano, en vez de intentar hacer una dieta que mejore su aspecto. Otro ejemplo serían las cicatrices, ¿por qué ese complejo? Esa sensación de que todo el mundo nos mira, que sólo se fijan en esas cicatrices que tanto intentamos tapar, sin pensar que esa cicatriz a lo mejor nos ha salvado la vida, que es únicamente una marca en la piel.
Los complejos surgen por tener baja autoestima, inseguridad en una misma y por miedo a ser rechazada en sociedad. Como biensabemos las personas tenemos una necesidad de pertenencia grupal, necesitamos formar parte de algo, de sentirnos valoradas, de mantener relaciones satisfactorias, etc.
Pero cuando hay algún aspecto de nuestra vida o de nuestra persona que nos preocupa, nos formamos esa impresión de que esa parte que tanto nos acompleja va a ser un gran impedimento a hacer una vida social activa.
Si reflexionamos acerca de lo que nos aporta tener un complejo nos daremos cuenta de que estamos obsesionados por aquello que la mayoría de gente ni presta atención, hacemos inferencias erróneas al pensar que nos juzgarán o desvalorarán por tener algún rasgo diferente. Más bien es la propia persona acomplejada la que hace que otros presten atención, por la falta de naturalidad, por la creencia de que nos juzgarán y por hacer cosas que sobresalen de lo habitual.
Todas las personas hemos tenido un momento en nuestra vida que nos hemos sentido acomplejados, y casi siempre es porque nos comparamos con los demás, son pensamientos irracionales en un momento en que no nos sentimos bien con nosotras mismas obteniendo una percepción exagerada de una misma. Por tanto podemos superar esos complejos, solo tenemos que pensar en las cualidades que poseemos, en creer en una misma y a aceptarse tal cual, sabiendo que las personas que forman parte de nuestra vida lo hacen por valorar como somos, no porque tengamos o dejemos de tener una cicatriz, un rasgo saliente o un carácter diferente.
Origen de los Complejos
Los complejos suelen tener varios orígenes siendo normalmente durante nuestra infancia, ya bien sea por un entorno familiar donde los padres no han prestado la suficientemente atención ni apoyo al niño, desvalorando cada acción o pensamiento; en el entorno escolar donde algún rasgo es diferente como ser más alto, más bajo, más gordo o más delgado; o durante la adolescencia donde ocurren muchos cambios hormonales y corporales; y sobre todo por la sociedad que marca unas modas, unos estereotipos y unos valores.
Un error que se comete con frecuencia es actuar o ser como los demás esperan o quieren, una debe ser como es, aceptando las virtudes y los defectos que hacen de cada persona única y especial. Si un complejo te obsesiona busca la manera de mejorar, pero para sentirte mejor contigo misma, sin tener en cuenta lo que puedan pensar los demás. Si tú te aceptas, los demás te aceptarán.
¡FUERA COMPLEJOS! CONFIA EN TI Y EN TUS VALORES